Agua de coco: 10 beneficios que debes conocer

El agua de coco no es agua con sabor a coco. Tampoco es un refresco. Es el jugo que se obtiene naturalmente del interior de los frutos de la palmera más cultivada en mundo, la Cocos nucífera, comúnmente conocida como cocotero. Los principales productores son Indonesia, Filipinas e India, donde el consumo de esta bebida es muy popular.

Hasta no hace mucho en Europa se conocía el coco por su uso en pastelería, ya fuera por la leche o por la pulpa rallada. Desde hace unos años el agua que los cocos tienen en su interior cuando aún están verdes se ha convertido en una popular bebida energética entre deportistas de élite y celebryties amantes de los productos naturales. Si bien hay pocas evidencias científicas de que sea una panacea, tampoco las hay de lo contrario. Lo que significa que es más saludable beber agua de coco natural y sin azúcares añadidos que refrescos. 

 

Un producto natural

El agua de coco es un producto totalmente natural que está en el interior de los cocos verdes, es decir los que aún no han madurado. En ese momento que es cuando se extrae, el agua supone el 95% del fruto. Al madurar el coco el líquido disminuye porque pasa a formar parte la pulpa blanca que se come troceada o rallada. La misma pulpa que se transformas en leche (sin azúcar) o crema (con azúcar) y se utiliza para cocinar y elaborar postres.

A los 6-7 meses el coco es verde por fuera y está lleno de agua, unos 240 ml por pieza. Este líquido incoloro, pero algo turbio, de sabor ligeramente dulzón y textura ligera, contiene entre 46 y 60 calorías por cada 250 ml según afirma un estudio de la prestigiosa Clínica Mayo. También hidratos de carbono, fibra (2.6 gramos en 240 ml), proteína, vitamina C, y minerales como magnesio, manganeso, potasio, sodio y calcio. Las cantidades de los minerales pueden variar debido a los cambios que tienen lugar en el agua de coco a medida que el fruto madura. 

Pasados los 10 meses, el coco se vuelve marrón oscuro y desarrolla una cáscara dura de piel fibrosa. El agua de su interior se reduce drásticamente y la pulpa blanca se vuelve consistente y sabrosa, lista para su consumo.

¿Cuánto agua de coco se puede beber?

El agua de coco llegó a Occidente en formatos exóticos: cocos verdes con pajita incluida. Ahora, convertido en un producto popular de consumo se vende en bricks ideales para almacenarlos en la nevera y tenerlos fresquitos siempre a mano.

El agua de coco resulta muy refrescante y quita la sed por su alto poder hidratante. En Asia es habitual encontrar vendedores callejeros cargados de cocos verdes que practican una incisión en la cascara de la fruta e introducen una pajita para que los viandantes (locales o turistas) puedan beber el agua mientras caminan, una estampa habitual en los países productores.

Uno o dos vasos diarios resultan saludables, ya que aportan pocas calorías y bastantes minerales beneficiosos. Sin embargo, conviene no sustituir el consumo de agua por el de agua de coco. 

10 beneficios del agua de coco

1.- Aporta energía

Un vaso de agua de coco contiene tanto o más potasio que un plátano (385 mg por cada 100 gramos). El potasio regula el ritmo cardíaco y mejora la función de los músculos. Mejora el rendimiento de los electrolitos del sistema nervioso y por tanto el rendimiento cognitivo. El cerebro se llena de energía.

2.- Es un hidratante natural

Además de su contenido en agua (94%) reúne importantes cantidades de minerales, concretamente potasio, magnesio, sodio, calcio y fósforo, los cinco elementos imprescindibles para recuperarse después de haber realizado ejercicio físico.  Sin embargo, las personas hipertensas no deben consumirlo en exceso ya que contiene sodio, mineral que deben controlar. El agua de coco 100% natural contiene más electrolitos que las bebidas deportivas. Son precisamente los electrolitos los que optimizan el nivel de hidratación en el organismo.

3.- Potencia antioxidante

No hay ningún alimento milagroso, pero algunos ayudan a que el organismo funcione mejor. Según estudios que se realizaron en animales (no se han hecho aún en seres humanos), el agua de coco retarda la oxidación de las células del hígado, previene la formación de los temidos radicales libres y disminuye los niveles de insulina. Es una fuente ideal de citoquininas, compuesto vegetal que se asocia con el retraso del envejecimiento de las células humanas. El agua de coco puede ser un buen aliado si queremos sentirnos más jóvenes.

4.- Mantiene los huesos en forma

El manganeso es un elemento esencial para el buen funcionamiento del cuerpo humano, que además es clave para evitar la artritis, la osteoporosis y las malformaciones de los huesos, y reducir el riesgo de diabetes o epilepsia.

5.- Ayuda a eliminar líquidos

El agua de coco, por su contenido en potasio, ayuda a eliminar líquidos y contribuye a reducir su retención en las zonas del cuerpo más propensas (sobre todo las piernas). Además de favorecer la disminución de los niveles de sodio del organismo. Es un diurético natural, que ayuda también a la eliminación de piedras en el riñón, ya que evita que los cristales de minerales se adhieran a las paredes del riñón.

6.- Combate la diarrea

En los países tropicales se ha empleado tradicionalmente para rehidratar a quienes sufren diarrea (sobre todo los niños) y también para prevenirlas debido a sus efectos beneficiosos sobre el aparato digestivo en conjunto. Además, evita la indigestión, el estreñimiento y los parásitos y ayuda a subir las defensas del organismo evitando infecciones.  Resulta imprescindible en el kit del gourmet viajero. 

7.- Favorece las buenas digestiones

El contenido en enzimas bioactivas ayuda a la absorción de nutrimentos, previniendo enfermedades de la vesícula y mejorando los procesos digestivos. También ayuda a prevenir infecciones por bacterias, virus y hongos; promueve la regularidad intestinal y la función saludable de la tiroides.

 

8.- Regula la tensión arterial

También hay evidencias de que el consumo regular pero equilibrado de agua de coco ayuda a controlar los niveles de presión arterial, ya que reduce, sobre todo, los niveles de presión sistólica.

9.- Mejora la circulación

Por su contenido en minerales puede ayudar a mejorar la circulación, aunque se trate de un proceso lento sostenido en el tiempo. Los milagros no existen. En el caso de los diabéticos puede prevenir complicaciones derivadas de la mala circulación de la sangre, como la pérdida de visión o el entumecimiento de los pies. 

10.- No engorda

Y tiene muy pocas calorías, muchas menos que los refrescos, pero tampoco es agua. El agua de coco resulta perfecta para combinarla con una dieta depurativa o de adelgazamiento, sobre todo después de haber realizado excesos como suele ocurrir durante las fechas navideñas. También para consumirla a diario, pero siempre con moderación.

En la sección de COCINA LATINA compartimos esta refrescante receta con una de las mejores aguas de coco del mercado Sangría Tropical